A pesar de que el agua es el recurso natural más abundante en el planeta, el acceso al agua dulce utilizable para consumo humano es cada vez más limitado. Este recurso se ve amenazado por el crecimiento de la población, las progresivas demandas de la agricultura y la industria y los impactos del cambio climático.
Octubre es un mes donde celebramos el cuidado y el respeto por nuestro planeta, por eso hoy queremos proponerles algunas maneras de cuidar este recurso tan valioso para todos.
En nuestro hogar
1. Utiliza TODA el agua que salga de la canilla.
Por ejemplo, si estamos esperando a que el agua se caliente, durante la transición, podemos poner un recipiente bajo la canilla para recolectar esa agua y luego usarla para regar, para beber, para nuestras mascotas, entre muchas otras.
2. ¡Recordá SIEMPRE cerrar la canilla!
Si estás lavando los platos, te recomendamos primero enjabonarlos y luego enjuagarlos a todos juntos. De esta forma, no desperdiciás agua mientras los enjabonás.
3. Descongelá con tiempo.
Muchas personas optan por descongelar sus alimentos en la bacha, dejándolos con el agua abierta. En Greenhaus te recomendamos que, si no tenés microondas, descongeles los alimentos con tiempo. Podés o bajarlos a la heladera o podés dejarlos afuera.
4. Dejá tu fruta y verdura en remojo.
No dejes la canilla abierta cuando lavás tus vegetales y frutas. Una excelente opción es llenar un bowl con los alimentos que desees lavar y llenarlo de agua. Podés cambiar el agua cada tanto, pero de esta forma no vas a desperdiciar. Un tip: ¡podés usar esa agua para regar! (Siempre y cuando no tenga ningún químico).
5. Cerrá SIEMPRE las canillas.
Cuando te lavás los dientes, te afeitás, te lavás las manos, te bañás, etc. Usá el agua necesaria solamente.
6. Chequeá todas las canillas de tu casa.
Llevar un control activo de la grifería de tu hogar puede ahorrar mucha agua. Si una canilla pierde, lo recomendable es arreglarla cuanto antes.
7. Cerrá la llave de paso cuando estés de viaje.
De esta forma, se evitan muchas fugas.
8. Llená tu lavarropas y lavavajillas.
Si vas a hacer un lavado en alguno de estos equipos, asegurate siempre que estén llenos en su capacidad máxima. Así, podrás hacer menos lavados y consumir menos agua, menos energía y menos productos, ¡increíble!
9. Optá por duchas cortas.
Y, en lo posible, mientras te enjabonás, podés cerrar la canilla también.
En el jardín
1. Evitá plantar grandes extensiones de césped.
Consumen gran cantidad de agua. Como reemplazo, podés plantar arbustos.
2. Elegí el sistema de riego adecuado.
El aporte de agua debe realizarse de acuerdo con las necesidades reales de cada planta. Siempre que sea posible, optá por el sistema de riego por goteo. Es muy eficiente y optimizás el uso del agua.
3. Seleccioná especies autóctonas de tu zona.
Estas ya están adaptadas al clima y al terreno y no demandarán muchos cuidados extras.
4. Tapá tu pileta.
Si tenés una en tu hogar, te aconsejamos taparla mientras no la usás. De esta forma, evitás que se evapore el agua y que se ensucie tan rápido.
Cuidar los recursos naturales que tenemos es tarea de todos y de todos los días. De nuestra parte, te asesoramos desde el comienzo de tu obra para que puedas cuidar de los recursos energéticos de manera eficiente y sustentable.
¡Un día y un cambio a la vez!